Campanadas a medianoche

"Campanadas a medianoche" (1965, Orson Welles)

Orson Welles fue un fiel y evidente admirador de Shakespeare, ya en el teatro destacó su versión de "Julio César" y luego llevó a "Macbeth" (1948) y "Othelo" (1951) a la gran pantalla. Pero fue "Campanadas a medianoche" o mejor llamada "Falstaff" la obra donde captura el mundo medieval Shakespereano, y aunque cuenta con un presupuesto modesto, de hecho en el camino se acabó el presupuesto y tuvo que reanudar meses después, posee mayor libertad para su ejecución.

Welles utiliza al personaje secundario Sir John Falstaff, interpretado por él mismo, como enlace entre diversas historias de Shakespeare: Enrique IV, Enrique V, Ricardo II y The Merry Wives of Windsor. El viejo gordinflón chamullento, borrracho y ladronzuelo es amigo del joven y rebelde príncipe Hal, heredero del trono.

Las traiciones y venganzas provocarán una batalla entre dos bandos que luchan por la obtención del reino, aunque como dice el mismo Welles, la película trata finalmente sobre la traición a la amistad. Alternando el drama y la comedia, el film va asomando los claroscuros de sus personajes.

Grabada íntegramente en España. Este es un proyecto con el que Welles se afanó, él mismo dijo que era su mejor obra. Por diversos motivos legales la película tuvo problemas de distribución y sólo hace unos años apareció una versión decente restaurada.

En blanco y negro, Welles crea en cada cuadro una foto reveladora. Bella en su composición, certera en sus diálogos, debe ser su película más emotiva. El desenlace es una buena analogía de como la industria del cine le dio la espalda al director, incluso luego de alabarlo y ensalzarlo, llenándose la boca con su legado, pero sin financiarle sus proyectos.

De antología la impresionante secuencia de la batalla donde se aprecia además una muy realista pelea de espadas. La actuación de Welles es sobresaliente. Aparece Jeanne Moreau como la prostituta amante de Falstaff, ¡Qué dupla!

Una de las grandes películas del genio de Welles, donde pone de manifiesto la ilusión de las relaciones humanas cuando los escenarios cambian. Welles en todas sus películas, por más que se hable de la técnica, de la profundida de campo, de su vanguardia narrativa y estilística, habla finalmente de este misterio que es el ser humano, de como urdimos intrigas y damos valor a lo que no lo tiene y viceversa.

Pulenta.