Violeta Parra: Elegiría quedarme con la gente

- Violeta, quisiera saber por qué descubrió ahce seis años la arpillería ¿Qué le ha entregado?

Sentí la necesidad de bordar cuando estuve enferma, teniendo que quedarme en cama ocho meses. Y pensé que no podía quedarme sin hacer nada. Un día vi lana y un pedazo de tela, y me puse a bordar cualquier cosa, pero la primera vez no salió nada.

- ¿Por qué?

Porque no sabía lo que quería hacer. La segunda vez que agarré el pedazo de tela, lo deshice y quise copiar una flor, pero no pude. Al terminar el bordado no era una flor sino una botella. Quise ponerle un corcho a la botella y éste parecía una cabeza. Le agregué ojos, nariz y boca. La flor no era una botella, la botella no era una botella sino una mujer como aquellas que van a la Iglesia para rezar todos los días. Por eso se llama La beata.

- ¿Sabía usted bordar, aprendió alguna vez?

No, no, no: no sé nada. El punto que uso para bordar es el más sencillo del mundo. Yo no sé dibujar.

- ¿O sea que usted reinventó todo?

Si, pero todos podemos inventar. No es sólo especialidad mía.

- Violeta, usted es poeta, es músico, hace arpilleras, hace pinturas. Si le dieran a elegir uno solo de estos medios de expresión, ¿cuál elegiría usted...  si no tuviera más que una sola forma de expresión?

Elegiría quedarme con la gente.

– ¿Y renunciaría a todo esto?

Es la gente la que me impulsa a hacer todas estas cosas.


- Extracto de la entrevista realizada por Madeleine Brumagne en el taller de la artista en Ginebra, Suiza, para el trabajo fílmico en 16 mm "Violeta Parra, brodeuse chilienne" (1964, Jean-Claude Diserens). Aparece traducida en forma íntegra en el libro publicado el 2016, "Violeta Parra en sus palabras. Entrevistas (1954-1967)" de Editorial Catalonia. Editado por Marisol García -



Comentarios

Entradas populares de este blog

Emborráchense

Lucho Awards 2022: Libros

Los anárquicos reyes, los descarriados magos